Cuidado capilar en verano: experta advierte sobre los riesgos de usar keratina con formol
Michelle Carpio recomienda optar por fórmulas seguras y nutritivas ante la alta demanda de tratamientos alisadores

Miami, 26 de mayo de 2025 – Con la llegada del verano, el aumento de la humedad y la exposición solar intensifican los problemas más comunes del cabello: frizz, resequedad, pérdida de brillo y debilitamiento. En este contexto, muchas personas recurren a la keratina como solución rápida, pero no todas las fórmulas disponibles en el mercado son seguras ni efectivas, advierte la experta en belleza Michelle Carpio.
“La clave está en elegir siempre la keratina ‘buena’”, subraya Carpio, fundadora de Michelle Beauty Hair y TopEnd Beauty. Según explica, esto implica evitar productos que contengan formol o sus derivados, un componente altamente agresivo para la fibra capilar y potencialmente nocivo para la salud.
Qué debe tener una keratina segura
Para que un tratamiento capilar sea realmente beneficioso, debe cumplir con ciertos criterios de calidad. “Una buena keratina está formulada a base de aminoácidos y se desarrolla en laboratorios certificados que garanticen seguridad y transparencia”, explica Carpio. Estos productos, además de alisar, deben nutrir e hidratar el cabello en profundidad, fortaleciendo su estructura y aportando brillo sin causar daños a largo plazo.
¿Qué pasa con los nombres comerciales?
La especialista también llama la atención sobre la proliferación de términos como “nanoplastia”, “cirugía capilar”, “alisado brasileño” o “japonés”, que muchas veces confunden al consumidor. “Los tratamientos deben evaluarse por su composición y no por el nombre que usan para venderse. Lo importante es saber qué contiene el producto y cómo actúa sobre cada tipo de cabello”, señala.
Elección personalizada según el tipo de cabello
No todos los cabellos responden igual a un mismo tratamiento. Por eso, Carpio insiste en que la keratina debe seleccionarse en función de las características de cada melena. “Un cabello fino y dañado necesita fórmulas suaves, con menos poder alisante y mayor capacidad reparadora. En cambio, el cabello grueso o muy rizado puede requerir una keratina con mayor capacidad de alisado”, detalla.
Verano y cuidado capilar: una combinación crítica
El verano intensifica la necesidad de cuidados especiales. La exposición prolongada al sol, el cloro de las piscinas y la sal del mar contribuyen a deshidratar la fibra capilar y debilitar su estructura. En este contexto, elegir productos seguros, libres de químicos agresivos y ricos en ingredientes reparadores, no solo es una decisión estética, sino también de salud.
Carpio concluye con una premisa clara: “La belleza debe tener propósito. Es hora de dejar atrás la idea de que el cabello solo puede lucir bien a costa de su salud. Hay alternativas que alisan, hidratan y protegen al mismo tiempo”.
