Claves para mejorar la asequibilidad del alquiler en Estados Unidos: qué pueden hacer los gobiernos locales y los inquilinos

La creciente dificultad para acceder a una vivienda de alquiler asequible es una realidad que afecta a millones de personas en todo Estados Unidos. Los precios han subido, la oferta se ha reducido en muchas áreas metropolitanas y las políticas públicas no siempre logran mitigar el problema. Frente a este panorama, especialistas en planificación urbana y economía de la vivienda proponen una combinación de soluciones estructurales y estrategias individuales que podrían aliviar la carga sobre los inquilinos.

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Reformas de zonificación para aumentar la oferta de viviendas

Uno de los enfoques más directos para abaratar el alquiler consiste en aumentar la cantidad de unidades habitacionales disponibles. De acuerdo con Sara C. Bronin, profesora de la Universidad de Cornell, los municipios que facilitan la construcción de viviendas generan una presión competitiva que obliga a los propietarios a ajustar precios a la baja. Para lograrlo, los gobiernos locales deberían reformar sus normativas de zonificación y permitir la edificación de viviendas como townhomes, apartamentos y unidades accesibles (“granny flats”) en áreas bien conectadas, cerca de calles principales, servicios y estaciones de transporte.

Eliminar políticas excluyentes y mejorar los subsidios habitacionales

Mike Mei, profesor de la Universidad de Colgate, destaca que uno de los mayores obstáculos es la persistencia de normativas restrictivas como la zonificación exclusiva para viviendas unifamiliares o los tamaños mínimos de lote. Estas medidas excluyen a las familias de bajos ingresos y limitan la densidad de las ciudades. Mei sugiere que además de revisar estas políticas, es necesario reformar programas de asistencia como los vales de vivienda y los subsidios del LIHTC para que estén mejor dirigidos a aumentar la oferta real y a los inquilinos con mayor necesidad.

Estrategias para encontrar alquileres asequibles en el mercado actual

Para quienes buscan alquilar, hay formas prácticas de maximizar el presupuesto. Sandy G. Bond, profesora de la Universidad de Bucknell, recomienda acudir a portales tradicionales como Zillow o Apartments.com, pero también explorar sitios de inmobiliarias locales o redes internas de grandes empleadores. Según la profesora Maggie Rong Hu, una buena práctica es establecer un umbral de gasto —idealmente un 30-40% de los ingresos mensuales— y filtrar los resultados por precio. Una vez identificadas las mejores opciones, conviene contactar directamente con propietarios o agentes para negociar condiciones favorables, como reducción del depósito o servicios incluidos. Tener todos los documentos listos (historial crediticio, comprobantes de ingresos, referencias) también mejora las posibilidades de cerrar un trato rápidamente.

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Ventajas y desventajas de alquilar una casa o un apartamento

La decisión entre alquilar una casa o un departamento depende del estilo de vida y del presupuesto. Las casas ofrecen más espacio y un jardín, algo valorado por quienes tienen mascotas o disfrutan del aire libre, pero exigen mayor mantenimiento. Los apartamentos, por su parte, pueden incluir servicios adicionales como seguridad o gimnasio, aunque con menos privacidad y más ruido. Con el aumento del precio medio de las viviendas a $424,000 y tasas hipotecarias por encima del 7%, cada vez más personas optan por prolongar su estadía en alquiler. Hoy, el costo promedio mensual de una hipoteca supera los $3,000, mientras que el alquiler medio ronda los $1,831, según un informe de Marcus & Millichap.

Siete formas inteligentes de reducir el gasto en alquiler

  1. Elegir un apartamento más pequeño o con menos comodidades para bajar el costo mensual
  2. Mejorar la administración del presupuesto y destinar una parte fija a la vivienda
  3. Compartir el alquiler con un compañero confiable para dividir gastos
  4. Buscar propiedades con servicios incluidos en el precio
  5. Comparar múltiples opciones antes de decidir para obtener el mejor valor
  6. Mantener el inmueble en buenas condiciones para recuperar el depósito de seguridad
  7. Buscar unidades con control de alquiler en ciudades donde este régimen está disponible

Conclusión

Frente a un mercado inmobiliario complejo y en constante cambio, tanto los responsables políticos como los ciudadanos pueden tomar medidas concretas para hacer más accesible el alquiler. Reformar regulaciones obsoletas, ampliar la oferta de vivienda y rediseñar los programas de ayuda son pasos urgentes que deben ser complementados con decisiones inteligentes por parte de los inquilinos. La asequibilidad habitacional no solo es posible, sino imprescindible para garantizar comunidades inclusivas y sostenibles en el futuro.

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