Desmantelan una red de tráfico de convertidores catalíticos en el área de Miami-Dade

Una reciente investigación llevada a cabo por la fiscalía estatal de Miami-Dade ha revelado una extensa operación de robo y venta de convertidores catalíticos, que generó ganancias millonarias para sus involucrados. Este caso se destapó tras el arresto de una pareja en mayo de 2023, quienes confesaron haber participado en el robo de estos dispositivos en varios vehículos, lo que llevó a las autoridades a descubrir una red delictiva que operaba desde la empresa GMCN Scrap Metals, localizada en Medley.

Detalles de la Operación

Los datos recabados indican que entre noviembre de 2022 y febrero de 2023, la red logró generar aproximadamente 53 millones de dólares a través de la compra y venta de convertidores catalíticos robados. Gerardo Hernández Rosada, dueño de GMCN Scrap Metals, fue identificado como el cabecilla de esta operación ilícita.

Arrestos y Repercusiones

La captura de la pareja en Coconut Creek no solo desató una investigación exhaustiva, sino que también condujo al arresto formal de 13 personas, de las cuales 11 han sido detenidas y dos continúan en calidad de fugitivos. La fiscal estatal, Katherine Fernández Rundle, subrayó que GMCN Scrap Metals se había convertido en un punto de referencia para ladrones de catalizadores, al ofrecer comprarlos sin hacer preguntas, lo que fomentó aún más esta actividad delictiva.

Métodos de Operación

  • Los ladrones frecuentemente trasladaban los convertidores robados a la empresa entre las 5 a.m. y las 9 a.m.
  • GMCN Scrap Metals estaba preparado para recibir grandes volúmenes de catalizadores, que a menudo provocaban filas de vehículos en sus instalaciones.
  • Los pagos se realizaban en efectivo, una práctica que facilitaba la ocultación de los delitos.

Impacto y Estrategias Futuros

Fernández Rundle resaltó que la estructura de pagos y la aceptación de catalizadores robados por parte de GMCN eran lo que hacía que esta operación fuese tan viable. El costo de cada convertidor robado podía variar considerablemente, con pagos de entre 200 a 300 dólares para modelos comunes como Toyota, y hasta 700 dólares para vehículos como Mitsubishi.

“Esperamos que al desarticular esta red, podamos disminuir notablemente la incidencia de este tipo de delito”, manifestó la fiscal, quien también destacó la importancia de eliminar a los principales actores en la compra y venta de estos dispositivos robados.

Conclusión

La investigación que continúa desarrollándose busca no solo llevar ante la justicia a los involucrados, sino también enviar un mensaje claro sobre la ilegalidad de este tipo de transacciones y su impacto en la comunidad. El caso de GMCN Scrap Metals se convierte en un ejemplo significativo de cómo las autoridades están tomando medidas para combatir el robo de catalizadores y proteger los derechos de los propietarios de vehículos.