MISSION, KS — 2 de octubre de 2025 — (NOTICIAS NEWSWIRE) — La tos y los estornudos que se escuchan en casa, en la oficina y en el gimnasio significan una sola cosa: llegó la temporada de resfriados y gripe. Si bien es imposible garantizar que no se enfermará, adoptar algunos hábitos saludables puede ayudar …
MISSION, KS — 2 de octubre de 2025 — (NOTICIAS NEWSWIRE) — La tos y los estornudos que se escuchan en casa, en la oficina y en el gimnasio significan una sola cosa: llegó la temporada de resfriados y gripe. Si bien es imposible garantizar que no se enfermará, adoptar algunos hábitos saludables puede ayudar mucho a prevenir los estornudos y los resfriados.
Comience por hablar con su proveedor de atención médica sobre cualquier inquietud que pueda tener y luego siga estas recomendaciones de estilo de vida para fortalecer el sistema inmunológico de forma natural.
Lávese las manos: Aunque probablemente sea la primera regla que se aprende de niño para evitar enfermedades, lavarse las manos sigue siendo una primera línea de defensa fundamental. Utilice agua tibia y jabón y frote sus manos durante al menos 20 segundos. No olvide la parte posterior de las manos, las muñecas y debajo de las uñas. Enjuague el jabón y luego séquese con una toalla limpia.
Comprométase con una alimentación más saludable: Alimentos como frutas, verduras, nueces, semillas, legumbres y granos integrales son recomendados por los expertos como alimentos esenciales para optimizar el sistema inmunológico. Las uvas frescas son un excelente ejemplo, ya que contienen compuestos vegetales beneficiosos vinculados con beneficios para la salud humana.
Las células sanas son la base de una buena salud, y los antioxidantes y otros polifenoles que se encuentran naturalmente en las uvas ayudan a proteger la salud y la función de las células. La buena noticia es que mejorar su dieta no requiere cambios drásticos: pequeños pasos, como sustituir los bocadillos procesados por uvas frescas de California o simplemente añadir un puñado de uvas frescas a su dieta diaria le aportarán estos compuestos beneficiosos a su rutina diaria.
O bien, puede agregar uvas a recetas como esta ensalada de remolacha y uvas de California con limón, una mezcla vibrante y fresca de color y sabor. Remolachas rojas y amarillas asadas se combinan con uvas dulces y jugosas, rúcula de sabor picante y semillas de calabaza, todo esto mezclado con una vinagreta de limón sabrosa.
Los estudios sugieren que algunos compuestos de la uva, como el resveratrol y ciertos flavonoides, pueden influir positivamente en la función inmunológica. Estudios adicionales muestran que agregar uvas, conocidas por su beneficio cardiovascular, a la alimentación diaria puede ayudar a mantener la salud del cerebro, el colon y la piel. Las uvas también son una buena fuente de vitamina K, la cual podría ayudar a mantener la salud pulmonar.
Evitar a otras personas enfermas: Además de lavarse las manos con frecuencia, mantenerse alejado de quienes están enfermos puede parecer una recomendación obvia, pero a veces es más fácil decirlo que hacerlo. Cuando sus seres queridos, amigos cercanos o compañeros de trabajo se resfríen o contraigan gripe, procure mantener la distancia y evite tocar objetos con los que estuvieron en contacto. Después de las rutinas a la hora de dormir con un niño enfermo o de las reuniones por la tarde con un compañero que no se encuentra bien, lávese bien las manos y limpie las superficies de uso común, como manijas de puertas o teclados de la sala de conferencias.
Priorizar la hidratación: Incluso durante el clima más frío, mantenerse hidratado sigue siendo importante para la salud del sistema inmunológico, ya que ayuda a que las defensas del cuerpo funcionen de manera adecuada. Beba agua durante todo el día y, para una dosis extra, aumenta la hidratación comiendo alimentos con alto contenido de agua, como las uvas, que contienen aproximadamente un 82 % de agua.
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Ensalada de remolacha y uvas de California con limón
Raciones: 6
1/4 taza, más 1 cucharada, de aceite de oliva extra virgen, dividido
3 cucharadas de jugo de limón amarillo
1 cucharada de miel
2 tazas de remolachas rojas y amarillas crudas, peladas y cortadas en rodajas (de 1/8 de pulgada de grosor), cortadas en medias lunas o triángulos pequeños
1/2 cucharadita de sal marina
3 tazas de uvas rojas de California cortadas por la mitad
1/2 taza de semillas de calabaza tostadas y saladas
2 cebollas verdes o cebollinas, cortadas en rodajas finas
4 tazas (3 onzas) de rúcula baby
pimienta recién molida, al gusto
Caliente el horno a 400 °F y cubra la bandeja para hornear con papel para hornear. En un tazón grande, bata 1/4 taza de aceite de oliva, jugo de limón y miel; reserve.
Coloque las remolachas cortadas en rodajas en la bandeja para hornear preparada y rocíe con el aceite restante. Añada sal y revuelva bien para cubrir. Extienda en una sola capa y hornee durante 25 minutos o hasta que esté tierno; deje enfriar.
Agregue las uvas y las semillas de calabaza al recipiente con el aderezo y revuelva bien para cubrir. Agregue las remolachas frías, las cebollas verdes y la rúcula. Mezcle suavemente; condimente con pimienta a gusto.
Información nutricional por ración: 250 calorías; 5 g de proteínas; 25 g de carbohidratos; 16 g de grasa (58 % de calorías provenientes de grasa); 2,5 g de grasa saturada (9 % de calorías provenientes de grasa saturada); 0 mg de colesterol; 320 mg de sodio; 3 g de fibra.
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Fuente: California Table Grape Commission